viernes, 13 de junio de 2008

MYOLASTAN 50mg COMPRIMIDOS RECUBIERTOS


No es que hayamos hecho un curso ceac de farmacia ni por el estilo pero la experiencia nos dice que no se debe hacer caso a un guarda de refugio al que se le pone el brazo como una cuerda de guitarra y utiliza estas “bonitas” pastillas para relajar su masa muscular.

Era el año 2.006, mi primera Cavalls del Vent y unas cuantas para los demás Sofokaos, llevaba 2 días arrastrando el tobillo y nadie tenia un antiimflamatorio ni nada por el estilo, así que opté “bajo mi responsabilidad” a tomarme un Myolastan. Recuerdo la cara de KOHETE 65 diciéndome “No te lo tomes, no te lo tomes” cuando ya había tragada esa maravillosa pastilla...

A partir de entonces me convertí en un autómata, el tobillo seguía doliendo pero vivía en una extraña nube, en un mundo feliz, sin preocupaciones, anonadado, bueno, creo que si analizáis la foto sobra cualquier descripción... a más de uno le gustaría verme así siempre, creo yo. Pero entonces no seria VATIO.

Solo os puedo decir que no os automediquéis, que como mucho hibuprofeno, espidifren o por el estilo, Ah!! Y masajitos de Traumel, elixir milagroso (Salo que razón tienes).

GALANPARRA 74, MARTILLO 74, KOHETE 65: ¿¿Contentos??

Bueno sobre el “elemento” del refugio solo os puedo decir que es una caja de sorpresas, un año la pastillita, otro año el perro, otro año el espectáculo erótico festivo... ya lo digo yo, que respirar CO2 también es bueno... todos los excesos son malos...

Por cierto, todo acabó como era de esperar: “buf”, duchita, cena en Cal Rosal y para casita, como diría Aníbal Smith “Me encanta que los planes salgan bien”

No hay comentarios:

Publicar un comentario