sábado, 6 de diciembre de 2014

TOUBKAL. Sofokaos en el techo del Atlas.




La idea de subir al TOUBKAL me rondaba desde hace mucho tiempo. Desde que en 2008 estuve por la zona del M´GOUN tenía ganas de volver por esas tierras y el poder rematarlo con la visita a la ciudad de Marraquech lo hacía un plan bastante bueno.

Así que este octubre deje ir la idea a los Sofokaos y no me costó mucho convencer a David, Tomas y a su amigo Alex para meternos de lleno en la aventura.

En pocos días teníamos billetes de avión , hotel en Marraquech y reserva en el refu  de Mouflons. El tiempo pintaba bastante bueno y ganas e ilusión no nos faltaban!!

El jueves ya dormimos en Marraquech, en el hotel Ali (sencillo, barato y en la misma puerta de la plaza Djema-el-fna). Desayunamos y negociamos un taxi dirección Imlil, donde empieza la ascensión.


En Ilmil volvimos a negociar una mula para cargar las mochilas y nos avisaron que hasta el refu no llegaban, que estaba todo bastante cargado de nieve, así que contratamos dos porteadores para llevar el peso hasta el refu.


Al llegar al morabito de Sidi Chamarouch la mula dijo basta y empezamos a encontrar bastante nieve hasta el refugio. Personalmente la subida se me hizo muy larga….físicamente no me encontré nada bien desde Imlil y fui de mal en peor..

Llegamos al refu ya casi sin luz e intentamos entrar en calor con la chimenea que tenían . El refu es inmenso y éramos 13 personas, era lo más parecido a un congelador.


Cenamos muy bien y descansamos lo que pudimos en la nevera. A la mañana siguiente preparativos y para arriba!! El día amaneció genial y sin una nube. Empezamos a subir y yo ya me di cuenta que no era mi día, me despido y les deseo suerte a los demás.

Al medio día fueron llegando todos eufóricos después de conquistar el TOUBKAL, comimos en el refu y una larga bajada nos dejó en Ilmil de vuelta.




Viajamos a Marraquech y el domingo lo dedicamos a visitar su plaza y su medina con su infinidad de callejuela y tiendas. Ya por la tarde fuimos al aeropuerto para poner fin a la aventura.

Un gran viaje que no pude rematar con el pico, así tengo la excusa perfecta para volver…


Martillo.


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